Oráculo
Síntesis. Cascada de Amor.
Un párrafo y a dormir.
Hoy, en la moto, he vuelto a tener un pensamiento que he tenido muchas otras veces mientras conduzco: “Ojalá mis pensamientos se fueran escribiendo solos”. De vuelta a casa, por la noche, he tenido un discurso interno relevante mientras iba en moto, y me habría encantado que se hubiera escrito directamente en este post de Substack, para que, al llegar a casa, solo tuviera que darle a “publicar”.
Ayer dije que quizás escribiría durante el día, pero, sinceramente, hoy me duelen las pantallas. Han llegado las primeras gotas de sangre. Mi ser oracular emerge y solo siento escuchar. Estar sentada o tumbada, y escuchar a través del oráculo.
Como compartí hace unos días en un post, ir en moto evoca en mí un sentimiento de libertad enorme. Me han dejado una moto durante un mes y me hace muy, muy feliz. Gracias, Manuel. Qué regalo. Iba agradeciendo a cada momento durante el trayecto hacia la clase de Yoga del Corazón: el olor de la mañana, el aire fresco en la cara, el sol en la piel, los campos verdes, las ovejas, el abuelito regando, el horizonte... Gracias.
Comparto solo unas frases y palabras más, a modo de síntesis:
Ayer dormí cinco horas (quise acostarme tarde y tuve que despertar temprano).
Soñé de nuevo con la caída de la Atlántida y la nueva Tierra (temas que pueden sonar raros y sobre los que no siento compartir mucho por ahora). Aunque el sueño fue triste, en él aparecía un ser muy alto, con los brazos abiertos que se convertían en alas, y nos fundíamos en un abrazo. Casa. Perla.
Antes de empezar la práctica de Yoga del Corazón, bailamos libremente.
Hoy es el cumpleaños de mi amiga Llúcia, quien ama Formentera. No he podido estar en su celebración pero nos veremos pronto.
Tuve una hermosa conversación con una de las alumnas de yoga mientras tomaba mi capuccino favorito de la isla. Hablamos de muchas cosas y de la importancia, en una isla pequeña, de que te dé absolutamente igual lo que los demás piensen de ti, y de crear tu propia experiencia con las personas que aparecen en tu camino, sin importar lo que otros te digan de ellas.
La verdad es que siento que, en esta isla, estoy muy al margen de todo; paso desapercibida. Estoy aquí principalmente por su naturaleza y mi vínculo con ella.Una persona me pidió si podía hacerle una limpieza energética, y dije que sí.
Una cascada de amor bañó el presente varias veces. Una fue esta:
La vida es tan bella tal como es. Siento a Dios en cada lugar, en cada momento. Solo necesito parar, respirar, y ahí está Ella. Es simple, no requiere ninguna práctica ni ritual específico. Ella está aquí, en mí, como yo, como la sombra y la luz del árbol mientras escribo estas palabras. Me siento bendecida, y abro mi corazón para dejar que este flujo de amor toque a cada criatura a mi alrededor, una chispa de amor profundo y sagrado en sus corazones, una espiral infinita de amor. Te amo, te amo, te amo.
Las lágrimas caen, creadas por la frecuencia de la gratitud. El mundo se derrumbó hace muchos años, y aun así, incluso en la miseria de este mundo y de sus criaturas que sufren, hay una fuente inagotable de amor, más fuerte a cada segundo, tejiendo el amanecer de una nueva era a través de la concepción de nuevas almas, una gran ola de frecuencia amorosa está llegando.Será divertido para mi alma presenciar esto, desde abajo, o desde arriba.
Muerte y renacimiento. Solo otra vuelta de la espiral de la Tierra.
Feliz cumpleaños, humanidad. Muy pronto.
Hoy las pantallas son demasiado densas para los ojos.
Oráculo. Visión. Atlántida. Llanto del alma. Zadkiel. Stella Maris.
Gracias.
Bendiciones.
“El Tao de la Sabia”
Y así, la Sabia hace su trabajo al no hacer nada.
Ella enseña sin decir palabra.
Cosas llegan, y las deja ser. Cosas marchan, y las deja ir.
Crea sin poseer.
Haciendo su obra sin reclamar mérito.
Y cuando su obra está terminada, la suelta.
Y así, perdura para siempre.
Traducción propia al español del fragmento inspirado en el Tao Te Ching de Lao Tzu que nos compartió mi maestra de partería cuántica.



